El
cine francés nos demuestra, una vez más, que se puede competir con los
gigantes a base de imaginación y sin grandes presupuestos.
Una película que nos hace comprender lo verdaderamente importante de un juicio.
Nos
presentan un tema tratado e interpretada con naturalidad, que introduce
al espectador en dos historias que lo atrapan, incitándole a tomar
parte activa en el juicio por parricidio y proponiéndole adivinar y
disfrutar con el devenir de la sencilla historia de amor.
El director francés, Christian Vincent expresaba que: "El cine no puede cambiar el mundo, pero sí ayudar a entender cómo funciona".
Y esto es lo que se consigue en la película, sacar a la luz cómo
funciona el sistema judicial francés. En el trasfondo nos muestra los
verdaderos intereses de los jueces a la hora de desarrollar un juicio y
el objetivo final de los planteamientos judiciales.
La película, además del guión, preparado por Vincent y pensando para Fabrice Luchini al que conoció en su ópera prima, se presenta con un lenguaje tan natural que da credibilidad a la historia.
Cuenta además con interpretaciones de excepción; a los dos protagonistas principales: Fabrice Luchini (el juez) y Sidse Babett Knudsen (Ditte) que dejan constancia de como expresarse ante las cámaras, se une, en una interpretación arrebatadora Eva Lallier en el papel de hija de Knudsen, sin duda una actriz con mucho futuro.
Película
francesa del 2015, que vuelve a respetar los tiempos de proyección, 98
minutos, que además está montada de forma tan coordinada que el
espectador no percibe el paso de los minutos consiguiendo una cinta muy
entretenida.
Guión y Dirección: Christian Vincent
Música: Claire Denamur
Fotografía: Laurent Dailland
Reparto:
Fabrice Luchini, (Michel Racine)
Sidse Babett Knudsen, (Ditte Lorensen-Coteret)
Eva Lallier, (Hija de Ditte)
SINOPSIS:
Michel Racine es el estricto ”Presidente” del tribunal de lo penal en Saint-Ome. una pequeña población francesa. Tiene fama de honrado y al que todos teme, odian y ridiculizan a la vez, apodándole “el juez de las dos cifras” ya que sus condenas siempre sobrepasan los diez años.
En
el juicio popular en el que se trata un caso de parricidio, descubre
entre el jurado a una mujer, médico-anestesista, que lo había atendido
seis años atrás tras un accidente y de la que se sintió secretamente
enamorado. El juez, que se encuentra en un momento delicado ya que está
iniciando su proceso de divorcio, ya no cree demasiado en la labor de impartir la ley, sin nuevos retos y en pleno declive existencial, se reencuentra con su pasado y descubrirá que la vida vuelve a renacer.
Premios:
2015: Premio César - Mejor actriz secundaria (Knudsen)
2015: Premio de Venecia, Copa Volpi – Mejor actor (Luchini)
2015: Premio de Venecia, Copa Volpi –Mejor guion
Resumen :
En el fondo es una historia de tintes trágicos, la historia de un hombre acusado de matar a su hija de seis meses, una historia que ha sido llevada a la pantalla de una manera realista,
muy cercana al documental, que no cae en el dramatismo. Muestra, eso
sí, las diferentes fases por la que pasa el juicio pero de una manera
sobria y con momentos de humor para que se reflejen las situaciones de
la forma más normal.
La película muestra el funcionamiento del sistema judicial francés desde dentro, vamos desentrañando como el grupo de jurados deben afrontar las declaraciones sin conocer la materia jurídica. Nos hace una panorámica de los prejuicios y de los juicios de valor fruto de la precipitación y afán de sacar conclusiones.
De manera sencilla nos muestra las historias individuales y sus motivaciones personales. Afronta, sin esconderse, los problemas sociales, raciales y religiosos
de cada uno de ellos y como van desarrollando sus conclusiones a pesar
de no obtener con los interrogatorios una verdad absoluta de lo que ha
ocurrido.
Película que recomendamos a los amantes del cine de reflexión
Yo estaré siempre con el Real BETIS, 
(Agencia Nuevas Dimensiones para la Revista NOVA DIMENSIÒ)
